Hay veces en las que es mucho más que tiempo, sino que es saber detenerse y apreciar.
Y no se trata de no se vulnerable, sino de salir de la jaula mental.
No debemos tener límites si hablamos de sentir.
No debemos temer, porque el miedo no existe si estamos en el presente.
Y en esa repetición de estado anímico, nos guía para tener calidad.
Comprender que podemos cruzarnos con montañas de problemas.
Pero si hacemos la pausa justa, encontraremos algo más.
Y todo lo externo nos habla.
Y si vemos figuras, se cerrarán las fisuras.
Si percibimos que detrás hay algo más, la búsqueda será más entretenida.
Mirar la vida es ser conscientes de que hubo un pasado, pero que eso nos trajo hasta acá.
Y las ganas de vivir, nos motivará a investigar.
La profundidad de nuestra mirada contendrá el misterio.
Como parte del juego en la que es mucho más que divertimento.
Es sobrevivencia y seguir hacia adelante.
Aunque haya momentos en que el laberinto nos quiera atrapar, la llave está en la pasión por lo que hacemos.
El paraíso divino existe.
Los caminos se abrirán si estamos dispuestos a caminar.
Porque el movimiento, lo hace el corazón y a él, jamás debemos fallarle.
💜
#MarianoSantoro 羊
