Movilizante puede ser la sensación interna, cuando estamos quietos.
Eso que revolotea en nuestro cuerpo.
Ese lápsus en el que nos transformamos en mejores personas.
Todo lo que exteriorizamos por sentir eso tan especial.
Eso, es un SÍ a la vida y al amor.
Sentimiento iluminado; es lo que nos permite brillar cuando sabemos que nuestro corazón, tiene un motivo para acelerar sus latidos.
Tanto por expresar y no existen las palabras para hacerlo.
Nuestra mirada muta en un haz de luz que por donde pose su visión, es como el mismo sol que entra por una ventana en el mejor amanecer.
Y ese amanecer es el que nos despierta, nos motiva a seguir sintiendo, porque lo que vemos nos agrada, nos alegra.
Sentimos porque vivimos algo que nos hace bien, que fortalece las emociones.
Nos dan ganas de hacer y no importa lo que sea, ya que la mejor actividad para hacer, es amar.
Amarte es darle un gran espacio en mi ser, a tu ser.
Una persona es mejor, cuando vamos desechando sombras de viejos amores, porque hay una nueva luz que aleja cada sombra, cada rastro de algo que ya no es parte de nuestro presente.
Y es un autoregalo, porque el premio es ese sentimiento iluminado que me guía hacia mi mejor camino, que es el que marca el corazón.
Esos ojos ajenos, que ya son parte del mismo brillo que nos deja ver lo nuevo, que nos asombra, nos sorprende.
Y la sorpresa es bella, porque bello es el instante que ya es parte y no deja separar, porque para amar, hace falta sentimientos y no son cuestionamientos, porque ya todo es respuesta y no hay que dar vuelta, porque la verdad es recta.
Sentimiento iluminado es esa protección interna que va cubriendo nuestro exterior.
La demostración de acciones se nota en nuestras facciones.
La gesticulación de sensaciones no sabe de limitaciones.
Porque todo está permitido cuando se trata de expresar lo que nos está pasando.
Se abren las puertas de la inocencia y sale todo lo positivo que vive en nosotros.
No hay timidez, sólo es sencillez.
El amor es simple, se disfruta y se vive.
No sabe de tiempo, sino que es algo duradero.
El amor no necesita ponerle nombre, porque nombre ya tienen las personas que aman.
Sentimiento iluminado es lo que comienza a tomar forma y se materializa en caricias.
Son las que nos hacen sentir con cada roce, algo inéxplicable y es bueno que no se lo pueda definir, para así, disfrutarlo más y no darle importancia a la mente, que aunque sabemos que está presente, el único que realmente siente, es el corazón.
MARIANO SANTORO
Eso que revolotea en nuestro cuerpo.
Ese lápsus en el que nos transformamos en mejores personas.
Todo lo que exteriorizamos por sentir eso tan especial.
Eso, es un SÍ a la vida y al amor.
Sentimiento iluminado; es lo que nos permite brillar cuando sabemos que nuestro corazón, tiene un motivo para acelerar sus latidos.
Tanto por expresar y no existen las palabras para hacerlo.
Nuestra mirada muta en un haz de luz que por donde pose su visión, es como el mismo sol que entra por una ventana en el mejor amanecer.
Y ese amanecer es el que nos despierta, nos motiva a seguir sintiendo, porque lo que vemos nos agrada, nos alegra.
Sentimos porque vivimos algo que nos hace bien, que fortalece las emociones.
Nos dan ganas de hacer y no importa lo que sea, ya que la mejor actividad para hacer, es amar.
Amarte es darle un gran espacio en mi ser, a tu ser.
Una persona es mejor, cuando vamos desechando sombras de viejos amores, porque hay una nueva luz que aleja cada sombra, cada rastro de algo que ya no es parte de nuestro presente.
Y es un autoregalo, porque el premio es ese sentimiento iluminado que me guía hacia mi mejor camino, que es el que marca el corazón.
Esos ojos ajenos, que ya son parte del mismo brillo que nos deja ver lo nuevo, que nos asombra, nos sorprende.
Y la sorpresa es bella, porque bello es el instante que ya es parte y no deja separar, porque para amar, hace falta sentimientos y no son cuestionamientos, porque ya todo es respuesta y no hay que dar vuelta, porque la verdad es recta.
Sentimiento iluminado es esa protección interna que va cubriendo nuestro exterior.
La demostración de acciones se nota en nuestras facciones.
La gesticulación de sensaciones no sabe de limitaciones.
Porque todo está permitido cuando se trata de expresar lo que nos está pasando.
Se abren las puertas de la inocencia y sale todo lo positivo que vive en nosotros.
No hay timidez, sólo es sencillez.
El amor es simple, se disfruta y se vive.
No sabe de tiempo, sino que es algo duradero.
El amor no necesita ponerle nombre, porque nombre ya tienen las personas que aman.
Sentimiento iluminado es lo que comienza a tomar forma y se materializa en caricias.
Son las que nos hacen sentir con cada roce, algo inéxplicable y es bueno que no se lo pueda definir, para así, disfrutarlo más y no darle importancia a la mente, que aunque sabemos que está presente, el único que realmente siente, es el corazón.
MARIANO SANTORO