Tu alma ha realizado las tareas necesarias para que puedas cumplir tus deseos.
Bailar, lo has hecho desde tu inocente niñez.
Volar, que se lo digan a tu mente; ella ha creado todos los mundos posibles y principalmente, el que elegiste para vivir.
Y en cada cumpleaños, anhelaste algo nuevo, una loca idea que sabías en lo más profundo de tu ser, que sería una realidad.
Aprendiste a esperar y en cada globo, escribiste algo que querías.
Y hoy se juntan para agradecerte y para cumplir lo que muchos creyeron fantasía.
Tus pies comienzan a elevarse.
Tu rostro, ya toma un color especial, que es el de la satisfacción.
Y la sonrisa acompaña y expresa felicidad.
Vestida de fiesta, porque hay algo por celebrar.
Tus brazos se extienden para abrazar el aire que te ayuda a respirar.
Bailar, porque el cuerpo tiene música.
Volar, porque es la mayor sensación de libertad.
Bailan tus emociones y se divierten.
Vuelan tus pensamientos a lugares que vas a descubrir.
Bailando, sos la máxima expresión de arte.
Volando, porque tus alas son la alegría de todo lo que lograste liberar.
Y allá vas, hacia donde el corazón te guíe.
Y acá estamos, viéndote llena de amor.
MARIANO SANTORO