Casi poseídos por sentir la obligación de llenar vacíos.
Espacios que han sido habitados por demasiadas personas.
Lugares en los que la gente, se perdía en todo sentido.
Instantes de diversión que se prolongaban según los invitados.
Los segundos se hacían amenos cuando había una conexión especial.
Es fácil hablar de fiesta cuando hay algo por celebrar.
Es complicado hacer una lista de los que uno desea que sean parte.
Ocupar cada centímetro haciendo bulto, no es lo indicado para tener una noche entretenida.
Y los días se fusionaban con lo recordado y los planes por venir.
Variaciones del tiempo y planificación.
Y las vacaciones mentales, requerían irse.
Escapar, jamás ha sido opción, sino que lo justo es un descanso.
Silencios imaginarios que piden reflexionar.
Etapas de reflexión que eran musicalizadas con el corazón.
Y la pasión está en todo momento.
La edad trae manías y algo de experimentación.
Las oportunidades no son perdidas cuando se las valora en tiempo real.
La duración de la felicidad se fortalece en el diálogo grupal.
Atravesar las estaciones con pasajeros que siempre tendrán el honor de llamarse amigos.
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#MarianoSantoro 羊