miércoles, 28 de noviembre de 2012

Lo que sale de vos

Lo que sale de vos son tus más puros deseos de felicidad.
Tu ansiedad y tu paciencia.
Tu alegría y tu perseverancia.
Lo que alguna vez creíste casual, es absolutamente causal.
Todo tiene un motivo y aunque muchas veces no lo entendamos, llega a nosotros por una razón.
Y no es cuestión de lógica, sino de sentimientos.
La conexión se logra cuando las personas tienen una misma idea.
El llamar mentalmente a alguien, el hecho que suceda algo tan insólito que nos sorprenda.
Todo es parte de un gran misterio y está en cada uno querer resolverlo.

El sentir ganas y hacer lo posible para hacer realidades, porque ya sabemos de mentiras.
Quizás nos hayamos olvidado de un tono de voz, quizás extrañemos escuchar al otro, pero lo que no se olvida es lo que se vivió.
Hay detalles que marcan una diferencia y no es cuestión de echarle la culpa al destino, porque los caprichos nos llevan a separarnos de lo que amamos.
Hay situaciones que aparecen y nos traen un mensaje.
Es bueno que sea así, aunque a veces no podamos encontrarle el sentido a dicho mensaje.
Pero es parte del gran juego de la vida, de conocernos y de no ser tan exigentes y permitirnos relajarnos, darnos nuevas oportunidad y en caso de haber pasado mucho tiempo, tratar de saber en qué anda esa persona que nos ha marcado.

Lo que sale de vos es vida, es historia y recuerdo, es anécdota y sentimiento.
Salen sueños y misterios, olvidos y pesares, alegrías y nostalgias.
Lo que sale de vos, son reflejos de lo que supe darte.
Sos el color que le falta al arcoíris para completar la maravilla.
Sos la gota necesaria para dejarme bañar en tu ser.
Sos una gran persona y lo que sale de vos, lo veo en mí.

MARIANO SANTORO

sábado, 24 de noviembre de 2012

Dueño de mis recuerdos

Un día fui alejando de mí, viejos prejuicios que ya estaban casi vencidos.
Me fui permitiendo algunas cosas que hasta las tomaba como prohíbidas.
Me fui liberando de presiones y descubrí que podía sentir de otra manera.
Que podía liberar algunas partes de mi ser que estaban en una caja fuerte.
Seguí consejos de amistades muy queridas y el agradecido comencé a ser yo.
Me encontré que era capaz de tener una relación, de ser simplemente yo.
De ser libre al exponer mis pensamientos y de ambicionar tener más vida.
Una vez no marca tendencia, pero fue una gran puerta que se ha abierto.
No era temor, ni alguna clase de miedo; simplemente que me gustaba ser así.
Y nuevamente agradezco el haberme asomado a esa puerta que se abrió ante mí.
La sorpresa y el recordar momentos de inocencia; el verme crecido y con aprendizaje.
Una mujer me abrió su puerta y me sentí en su casa y su casa era su corazón.
El mejor hogar es el que habitamos día a día y es nuestro cuerpo, nuestro ser.
Crecí cada día y aprendí que un mundo nuevo estaba dispuesto a recibirme.
Me sentí acompañado, me sentí escuchado, me ví en otra persona y me gustó.
Hoy, extraño besar, abrazar y lo demás; extraño verme de esa manera especial.
Me descubrí haciendo cosas únicas, como los momentos vividos.
Me permití sentir y no sentir verguenza, me dejé llevar y me llevaron al amor.
Soñé despierto, porque mirar lo que me pasaba, era el mundo perfecto.
Hoy no estás, pero yo sigo estando; hoy no te veo, pero te encuentro en mi corazón.
Le he llevado la contra a muchas personas y me he sido fiel a mí mismo.
Soy y seré quien quiero ser y tengo ganas de contarte; aunque quizás me leas.
Mis palabras son mucho más que texto, mi corazón es mucho más que sentimiento.
Son varias las veces en que quisiera que me escuches y es ahí cuando le hablo a mi corazón.
La vida hay que vivirla y en las pruebas que se nos presenten, hay que enfrentarlas.
Le doy la cara al mundo y muestro mi esencia a quien la sepa valorar y entienda de qué hablo.
Aprendí mucho y aún quiero ser un buen alumno; porque el mejor colegio es vivir la realidad.
Me quiero enviciar de lo que alimente mi alma, me quiero enamorar de la persona que me admire.
El menú de deseos se amplía cada día y hay lista de espera para que esos sueños sean reales.
Desde hace mucho que aprendí a caminar y seguiré caminando por el lugar que elegí.
Porque me permito emocionar, me decido a soñar y me quiero ver crecer.
Soy dueño de mis recuerdos.
Y ahí, tenés tu lugar reservado por siempre!

MARIANO SANTORO

lunes, 19 de noviembre de 2012

Haciendo historia

Se suele decir que uno está pasando el tiempo y creo que la vida es mucho más que eso.
No se trata de dejar que la vida nos pase de largo, sino que hay que vivirla y dejar que nos suceda lo que el destino nos tenga marcado.
Hoy, me veo haciendo historia; ver que se me ha concedido un don y que sé aprovecharlo.
El arte ha estado siempre en mí y al sumarle la habilidad para agregar detalles a todo lo que sea artístico.
Porque arte también es amar, es dar y agradecer.

El arte está en nosotros, solo debemos pulirlo y no dejar pasar eso que tenemos.
Por mi mente, pasan idea y muchas se acomodan esperando su turno.
Las que ya tienen un lugar de privilegio, disfrutan de estar cumpliendo su misión.
Los planes que se me ocurren, de a poco los voy llevando a la realidad.
Sentirme creador, gracias al verdadero y único creador que es Dios, me satisface; me llena de emoción.

Ver que las personas puedan mejorar su calidad de vida, de que puedan hacer amistades, de que puedan apostar al amor de una pareja, de saber que pueden sentirse escuchadas y recibirán el mejor y sano consejo.
Hoy, me veo haciendo historia, porque lo que nació como un blog, hoy es un libro.
Todo lo que uno haga, puede ser mejorado y perfeccionado.
Cuando una idea se gesta y si puede tener la visión de que puede crecer, una inmensa energía lo hará posible.
Haciendo historia y sentirme feliz, porque la alegría es natural; porque la adultez llega bien; porque los nervios siguen estando y es la adrenalina necesaria para probar mi habilidad de hacer que las cosas funcionen.

La historia pasa por contar lo que uno ha hecho y el hecho de estar vivo y de poder disfrutarla, es doblemente satisfactorio.
Siempre he pensado en dejar huellas en el camino que me toca caminar.
Hoy miro hacia atrás y siento que hubiese querido hacer muchas cosas que no cumplí, por diferentes motivos; pero ese arrepentimiento ha mutado, ha cambiado y hoy veo hechos y eso es lo incentivador.
Todos pueden vivir, pero no todos pueden disfrutar de lo que hacen y siento como deber, contarles a todos los que se crucen en mi camino, que es posible; que hay una mejor vida, que se puede si simplemente tienen fe.

La ansiedad no es buena amiga de la paciencia, pero en la mitad, está la tranquilidad y si uno cree y desde sus entrañas sabe que está haciendo historia, que se está generando una gran energía positiva para seguir creciendo y creyendo que aún hay más, la naturaleza y el universo están mirando y nos conceden el regalo maravilloso de vivir cada instante y disfrutarlo.
Hacer es la acción de imaginar un proyecto y llevarlo a cabo.
Historia es lo que al pasar los años, uno puede llamar como trayectoria y la perseverancia de haber hecho realidad lo que se deseaba.
Para tener una historia hay que escribirla y día a día, nos enfrentamos a una gran hoja en blanco.
Nuestra misión es llenarla con positivismo y mucha fe en lo que hagamos.

MARIANO SANTORO

viernes, 16 de noviembre de 2012

Intentar

He aprendido que la vida da muchas oportunidades y que en todas hay nuevos aprendizajes y hasta nuevas lecturas.
Son muchísimas las veces en las que me pregunto si extrañar es virtud o defecto.
Hoy sé qué quisiera hacer, pero ni siquiera pruebo con intentar.
No es miedo, quizás temor al rechazo.
Sé que pudiera hacer y me quedo en silencio.
Y no es que mis palabras hayan sido muchas, sino que quiero controlar mis latidos.
Intentar, es algo que me gusta hacer, ya que gracias a eso, puedo progresar.

He hecho mucho por los demás y lo seguiré haciendo.
En lo personal, congelé sentimientos.
Los he guardado en un freezer y cada tanto abro para ver si están ahí y sí, los veo y hasta los siento, pero no los saco a la intemperie.
Mi corazón no merece ser usado.
No es que me ponga frenos, ni contras, sino que lo que quiero, hoy no está.
Sé lo que soy e imagino quien seré.
Sé que hay un futuro, porque el presente me gusta, me agrada mucho.
Sé que alguien es parte de mi pasado y sé que hay verbos para conjugar lo que siento por una persona.

Sé lo que es soñar y también despertar.
Sé lo que es imaginar y luego concretar.
Pero hay una materia que es la que me cuesta y se llama Intentar.
No hablo de metas, ni de proyectos personales; hablo de sentimientos, hablo de lo que es querer a alguien.
Y en eso no intento, simplemente hago.
Y sé que soy un profesional en esperar y que la paciencia me costó aprobar y hay muchas materias que nos da la vida y siempre es cuestión de tiempo para superarlas.
Y a la vez no es superar un momento pasado, porque lo quisiera en el presente.

Y no es confusión, porque mi corazón se acelera cuando pienso en un futuro acompañado.
Querer es saber; sentir es confirmar.
Olvidar, no lo haré nunca.
Sufrir, ya no es parte de mí.
Sé muy bien que hay que estar dispuesto y eso también es parte de intentar.
Esperar y estar expectante.
Creer y estar preparado.
Reír y estar con el corazón con ganas de amar.
Intentar; trataré de conectarme con los sentimientos que se alojan en otro ser y hacerle saber que acá estoy, que acá estaré.

Intentar, sin perder las ganas de vivir.
Quizás esta carta llegue a destino; quizás el Destino sabe muy bien qué hacer.
La causalidad ha sido parte de mi vida y una mujer, me ha conocido vivir.
No hay señales y hay mucha luz para poder verlas.
No hay intercambio y hay mucho pensamiento.
Los sentimientos en mi vida, no mueren; he aprendido a alejarlos un poquito y los miro cada tanto.
Porque soy recuerdo y me quiero.
Porque soy hombre y te espero.
Y es por eso, que quisiera intentar.
Dentro de esa palabra, tengo mucho para dar.

Si alguna vez se abre la palabra intentar, sé que encontrarás al verdadero.
El que se dejó conocer y el que se permitió ser!
Intentar; es eso que me hará crecer.

MARIANO SANTORO

domingo, 11 de noviembre de 2012

Prepararse para amar

En la vida, hay que estar preparado para sentir.
Son infinitas las situaciones que se nos pueden presentar.
Muchas de ellas, ni siquiera imaginábamos que eran posibles de concretar.
Porque muchas veces, nuestra mente nos limita, nos pone frenos pequeños y nos va cerrando la perspectiva de lo que deseamos.
Hay un enorme espejo que está delante y aunque tratemos de obviarlo con nuestra mirada, es nuestro ser quien lo mira permanentemente.

Es el espejo donde miramos y exteriorizamos lo que sentimos y nos devuelve un poco más de eso que damos.
Se dice que matemáticamente, nos conviene hacer siempre el bien, ya que lo que damos, se multiplica.
No tiene sentido hacer el mal o algo que dañe a otros, porque ese espejo nos mira siempre.
A la vez que Dios nos filma las 24 horas del día!
Hay que prepararse para amar, ya que diariamente viviremos lo que el destino nos ponga en nuestro camino.
Reflejemos naturaleza, porque en su sabiduría está el crecer sanamente.

Reflejemos emociones, porque recibiremos el cariño que todos los que nos rodean pueden darnos.
Reflejemos paz, porque en la tranquilidad es cuando se planifican los logros por venir.
En la amistad, está el amor sincero, porque una sola mirada puede decirnos muchos más de lo que dice una palabra.
Esos consejos fieles que siempre están cuando estamos abiertos a recibirlos.
Todo es un gran espejo donde podemos llenarlo con imágenes bellas para reflejar a otros.
Un laberinto con salida hacia la libertad, hacia la paz interior.
La única salida es siempre hacia la esencia verdadera de lo que somos.

No hay finales porque el principio vive eternamente en nosotros.
Abramos nuestro corazón al destino.
Miremos todo lo que Dios tenga para mostrarnos.
Disfrutemos de buenas noches en buena compañía, porque a cada instante estamos fabricando momentos que ya se van sumando a la enorme lista de recuerdos bellos.
Mientras caminemos, intentemos dejar buenas huellas, para que otros nos sigan; porque podemos iluminar caminos ajenos, porque siendo buenas personas y haciendo el bien, todo es crecimiento, todo es energía positiva.

Hay que prepararse para amar, porque el amor está disponible desde el primer segundo que nos decidimos a tener una vida feliz.
MARIANO SANTORO

jueves, 8 de noviembre de 2012

Dos caminos, una vida

Una persona no solo se separa de otra, sino que se separa de diferentes situaciones.
A medida que queremos abandonar algunas costumbres que nos hacen daño, queremos alejarnos.
Deseamos crecer en todos los niveles y queremos más para nosotros, porque sentimos que realmente lo necesitamos.
Cuando la noche toma control de nuestro ser y aparece la soledad, es cuando más nos cuesta enfrentar a la realidad.
Solemos distraernos, pero no nos enseñaron a buscar dentro de nosotros.
Ese gran misterio de descubrir qué hay en nuestro ser y quién vive en realidad en nuestro cuerpo.
Hasta hay veces en las que nos sentimos intrusos de nuestro propio cuerpo.
Como que estamos viviendo en un lugar equivocado.
Y cuando vamos llegando a saber más de nosotros, a ver las maravillas que habitan este envase que le damos uso y abuso, sentimos unas inmensas ganas de un cambio.
Sabemos que de seguir así, con vidas sin rumbo, no llegaremos a ningún sitio.
Y un día nos separamos; de personas, de trabajos, de situaciones.
Y un día te encontrás parado frente a opciones.
Pero creciste y aprendiste que no todo conduce hacia el lugar que deseás.
Recordá que la rapidez, no te lleva a buen destino.
Y cuando te ves dudando, frenate unos instantes; respirá y seguí a tu corazón.
Que cada latido sea tu GPS para que logres avanzar en todos los aspectos de la vida.
Un camino puede dividirse y uno de ellos puede ser un atajo y el otro, una perdición.
Pero no te quedes con la visión externa de las cosas; sino que tu interior sabrá guiarte.
Entre dos caminos visibles, siempre hay algo más.
Un árbol lleno de vida que crece de manera saludable puede ser tu salvación.
Porque los caminos te llevan por tierra y un árbol, crece hacia tus ideales, hacia tus metas y a tu cielo.
Ese mismo cielo que al verlo, tu interior se limpia de todo lo negativo que pueda suceder.
Haz que crezca en ti las mejores ramas para abrazarte a la vida.
Y que cada hoja, sea un hermoso recuerdo de todo lo vivido hasta hoy!
Crecé, porque un día es una vida y tu vida, tiene mucho valor.
Amate y recibirás la mejor recompensa, que es la de encontrar el único camino que te lleva a la felicidad.

MARIANO SANTORO

sábado, 3 de noviembre de 2012

La llave del día

No te agota seguir abriendo puertas y encontrar lugares que te dejan un vacío emocional tan inmenso que cuesta muchísimo volver a la normalidad?
Te acordás de los lugares que te han echado?
Acaso estarías bien con esa gente?

Quiero contarte que lo que buscabas ya debes dejar de hacerlo, ya no más.
Todos los días podés encontrar problemas o soluciones; el poder de decidir, lo tenés vos.
Y te digo que tenés la llave del día; porque cada día puede ser una vida.
Todo lo que no sabías o no supiste querer para vos, hoy ya quedó en un lugar que no podés volver.
Tu mente quiere hacerte viajar y tu corazón sólo quiere mirar hacia el horizonte.

En tu amanecer, podés cambiar tu mundo.
Tenés la llave, ya podés abrir mucho más que puertas; podés abrirte vos; podés dejar de aparentar para empezar a ser.
Las apariencias, las personalidades, los personajes y todo lo que engaña a la mente, no forman parte de tu vida.
Hoy podés abrir tu corazón y saldrá la sinceridad que siempre protegiste; la honestidad que quisiste compartir y el amor que soñaste en infinidad de noches casi eternas.
Despedite del ayer, escapate de tu pasado.
El único momento que tenés que vivir es hoy y tenés la llave del día.

Esa llave que abre lo que aún ni siquiera imaginaste.
Lo que tu mente ha cerrado por años, hoy te pide salir.
Ya el encierro quiere dejar de ser.
Abrí tu día distinto; hacé algo que te guste, perdele el miedo a lo que vendrá; porque cuando comenzás a ver, la vida te mostará un mundo y tenés que disfrutarlo y vivirlo.
Hay muchas llaves dentro de tu ser; tu cuerpo está lleno de llaves que abren diferentes cosas.
Vos tenés un gran potencial en tu ser; tenés la magia que puede hacer realidad algunos de los sueños que se atreven a cruzar por tu mente.
Tu llave del día, te permite abrir y dejar atrás una cantidad de situaciones que no aportan.

La llave del día, es la que cuando amanecés, respirás naturaleza y una sonrisa comienza a instalarse en tu rostro y se quedará ahí; todo el tiempo que vos le permitas quedarse.
Tu día, es hoy; tu llave, es tu corazón.

MARIANO SANTORO