Qué hermoso es el momento en el que empezamos a configurar una lista.
La misma puede contener deseos y también aquellos sueños que teníamos en la niñez.
Hacer una lista es estar preparados para recibir.
Hacemos el pedido que sale desde el corazón.
Le sumamos las ganas de tener eso que queremos.
Pero no por simple posesión.
Sabemos que lo merecemos.
El hecho de escribirlo ya lo estamos soltando al universo.
Se expresa a través de palabras en un papel.
Y nos recuerda a la infancia con la llegada de los Reyes.
Cada uno sabe si se ha portado bien en este viaje llamado vida.
Y si filtramos y decidimos tomar solamente el último año, será un interesante testeo.
Como cuando hacemos las compras del mercado.
Todo lo que se nos ocurre que nos falta, lo ponemos ahí.
Pero no lo hacemos desde la carencia, sino de saber que eso que viene, tiene un valor especial.
Y la espiritualidad siempre está presente.
Y aunque la lista se extienda, todo lo que no consigamos ahora, queda para un futuro cercano.
Y ojalá que cuando tengamos lo que figura en la lista, sepamos disfrutarlo.
Porque materializar deseos es la mejor forma de sentir satisfacción por lo que hicimos para conseguirlo.
💜
#MarianoSantoro 羊