martes, 19 de julio de 2011

Desde adentro

Fechas que marcan un antes y un después.
Fechas que sirven como balance y se hace para equilibrar lo que uno viene viviendo en carne propia.
Mucha gente he conocido durante el último tiempo y muchas personas que seguirán estando.
He recordado momentos y aprendí a superarlos y a saber que si dejaron huellas, vuelven, aunque no sea de la manera en que uno quiere.
Ya no recuerdo la última vez que lloré y me alegra saber eso.
Ya no siento que haya alguien que merezca una lágrima mía; sé quién soy y no tengo necesidad de rendir exámen para que me conozcan.
Mi vida y lo que hago, la expongo.
Mi privacidad, seguirá siendo eso y cada día con más recaudos, con más mano firme para discernir quién viene por buenas causas.
He aprendido y lo disfruto.
La sabiduría no tiene límites aunque uno sí los tenga.
Aprender, saber, dejarse llenar por cosas que marquen y que no vuelvan a dejar vacíos.
Mis criticas, seguirán y mis puntos de vista polémicos, también.
Visionar no es negativo.
Ver las cosas antes de que sucedan es muy acertado.
Nadie cambiará mi manera de ser.
Modificaré lo que necesite.
Cambiaré pequeñas costumbres.
Pero seguiré siendo el mismo; el que se hizo solo, el que aprendió a escribir para poder leerse y comprobar que la vida es una gran experiencia.
El que aprendió a hablar, ya que desde el corazón no alcanzaba para demostrar amor y cariño.
El que supo que decir verdades supera a las mentiras que cualquiera puede decir sobre uno.
El que se hace cargo de ser caprichoso, soberbio, orgulloso y seguro de lo que hace y dice.
Soy tantas cosas que nunca podría terminar de decirlas, pero sé lo que dejo en la gente; en los que me rodean.
Me hace mucho bien saber que dejo huellas; que muchas de las personas que se han sumado a mi vida, me lo hacen saber.
Valorarme y confirmarme que no me equivoco, que el camino que elegí no es fácil, pero me lleva adonde quiero; que ese camino tendrá muchas novedades y sorpresas agradables.
Enamorarme es solo un complemento, ya que mientras tenga amor para dar; lo de compartir se da solo; el destino se encarga cuando ambos lados están preparados.
Soñé tantas cosas que el estar despierto me las hizo ver y algunas están a la distancia, pero siguiendo el camino de la verdad, las conseguiré; me serán ofrecidas por la vida y seré más feliz de lo que soy.
Muchos de los tesoros que tengo son cosas materiales, pero alguna vez me autodenominé coleccionista de sentimientos y eso se debe a que en cada objeto que guardo con cariño, dejo historias.
Pero tengo tesoros de mi crianza; los valores y la sinceridad, entre muchos otros.
Viví muchas historias, fui protagonista siempre.
Me aparté de algunas que me hicieron mal.
Me jugué por otras que también me hacían mal, pero al priorizar lo que siento, la mente las dejó de lado; aunque nunca termina de alejarse y esas dudas aparecen.
Pero no hay dudas en mí de las que ya no las he estudiado.
Voy por mucho más.
Logré crear algo que tiene mucho futuro.
Me gusta hacer el bien, me gusta hacerme bien.
Me premia la vida en cada minuto que alguien se acuerda de mí y escucha mis palabras; en las que lee mis palabras; en las que piensa mis palabras y las hace suyas.
Hoy, me toca dar gracias!
Gracias a Dios por darme vida y poderla vivir!
MARIANO SANTORO