Anoche me asomé por la ventana y vi a las 3 Marías.
Sentí que me hablaban y todo mi ser se llenó de una sensación especial.
Fui corriendo hacia el Arbolito de Navidad y descubrí que debajo de las cabritas, había un pequeño sobre.
Los demás regalos, ya se habían abierto en sus respectivas fechas.
Pero eso que estaba ahí, me sorprendió.
Y no pude aguantar la espera a la noche de Reyes.
Lo abrí tímidamente, pero con la ansiedad de saber que podía tratarse de algo único.
Y sí, mis párpados tomaron mayor volumen al ver su contenido.
Un millón de pesos!!!
Sin hacer ruido, caminé hasta mi habitación y empecé a escribir todo lo que me dieron ganas de hacer con esa plata.
Y sí, la vecinita de la plaza, estaba arriba de la lista, ya que siempre he querido invitarla a tomar un helado.
Pensé en que mi karting necesitaba algunos arreglos de pintura.
Si el clima ayudaba, me iría a dar unas vueltas en la calesita de Matilde; la vez anterior estuve muy cerca de sacar la sortija.
Y aunque para mi cumple aún faltaban 6 meses, ya sabía que lo pasaría con mis compañeritos del cole.
Desde temprano, iríamos al Italpark para aprovechar la mayoría de los juegos y después a comer al Pumper; un menú completo para cada uno de mis amiguitos.
Pero volviendo a este verano, llamaré a alguna amiga para ver si me invita a la Pelopincho.
La última vez, me insolé y mi madre me puso un vaso con agua y una toalla, hasta que hizo burbujas y se me pasó el dolor; fue un milagro.
Realmente soy millonario al tener a mi familia como eternos guías en mi camino de vida.
La verdadera magia de los Reyes, es que podamos mantener la ilusión de que siempre estaremos en contacto con nuestro niño interior.
💜
#MarianoSantoro 羊
