Llueve en ti y sobre ti.
Una renovación de energía que llega en clave positiva.
La música acompaña esas lágrimas del cielo que ayudan a limpiar tu interior.
Cada gota entra en vos con un poder sanador, que cura y motiva, que tiene mensajes para ofrecernos.
Tu carne se distiende y permite que la naturaleza hable y se exprese.
Y por tus venas corre sangre sin apuro, sólo que fluye, al igual que tus deseos más genuinos.
En la pureza de tu ser, llegan esas gotas transformadas en notas.
Música pasional que acompaña buenos recuerdos.
Llueve en clave de si, porque de ahora en adelante, todo será positivo.
Aquí y ahora es el regalo más hermoso del presente.
Llueve y no es para quejarse, sino que sirve para agradecer.
Todo llega en el momento exacto para que le demos la mayor relevancia.
Bendecida lluvia que nos corre el maquillaje que supimos conseguir, para esconder tristezas que no querían alejarse.
Tu ser se relaja y deja que las gotas caigan como notas y nos ofrezcan la más bella melodía.
Vivir en armonía es posible y comienza con nosotros, artistas de la vida que en cada amanecer, iluminamos la hoja en blanco que nos toca por vivir.
Caen notas que guardamos en nuestro corazón para darle ritmo a nuestra existencia.
El deseo de sentir, se mezcla con nuestras ganas de vivir.
Los secretos mejor protegidos, se abren con la llave del amor.
Y la clave que revela las soluciones que nos abrirá cada una de nuestras nuevas oportunidades, se logra amando lo que hacemos, dando gracias al universo, que es el poema que nos toca la música del ser.
MARIANO SANTORO