Muchas veces te han llamado introvertida.
Pobres de aquéllos que se limitan a no soñar.
Tu vida ha sido siempre de novela.
Viajaste por todos los lugares de la imaginación.
Aprendiste cada uno de los desafíos que la vida te pondría por delante.
Y siempre, te divertiste.
No le diste lugar a lo negativo, porque lo tomaste como un nuevo reto.
Soñaste despierta y te sorprendiste todas las veces que pudiste.
Tu casa estaba repleta de paredes con libros y ahí supiste encontrar tu mundo.
Ese que cambiaba cada vez que tomabas un nuevo libro por leer.
Fantaseaste con las historias y fuiste creando la tuya.
Tu mirada se transformó en experta.
El brillo que emanaban tus ojos, era luminoso en todo sentido.
Los que se acercaban, quedaban fascinados y querían escucharte.
Una persona de mundo, que conoció lugares a través de las páginas.
Una niña eterna que conoce el valor más preciado de la vida.
No necesitás buscar, porque todo lo bueno, te encuentra.
Es muy lindo cruzarse con personas como vos, llenas de luz, llenas de magia.
Magia sos vos y todo lo que mires, es energía divina.
MARIANO SANTORO