sábado, 30 de marzo de 2019

Tiempo amigo

Por todas las calles que has andado, has logrado conocer a cientos de personas.
Cruzaste palabras con varias y otras, tan sólo dejaste que se crucen en el camino.
Supiste elegir a los que querías tener del lado de tu vida.
Un gran círculo que se fue achicando a través de los años.
Lograste la maravillosa conexión para poder llamarlos amigos.
Una de las mejores etiquetas que uno pueda tener.
Compartir mucho más que momentos, porque en lo cotidiano, se ve y se siente lo que se puede lograr de esa unión.
Ocupaste lugares y puestos en diferentes trabajos.
Viajaste por donde pudiste y aprendiste a quedarte en pocos sitios.
Y lo mejor, es que has podido irte de algunos lugares, sin extrañar. 
Uno sabe dejar recuerdos en los demás y a la vez, sabe elegir lo que quiere guardar y proteger.
Hubo suelos que pisaste en los que se alegraron con tu presencia.
Hubo instantes en los que tu energía, comenzaba a bajar y aprovecharte a salir.
Diste todas las vueltas para obtener lo que quisiste y la perseverancia fue tu gran valor.
Sumaste valores a toda tu esencia.
Miraste relojes porque la puntualidad es el mayor respeto por el otro.
Y si se trata de valores, el diste al tiempo, lo mejor de tu corazón.
La pureza de los sentimientos a ese mágico artefacto que no sólo te dice las horas.
Tu tiempo es precioso y lo que hagas con él, se potenciará, por eso, siempre será tu fiel amigo.
MARIANO SANTORO

miércoles, 27 de marzo de 2019

Siembra de amor

La ventana de la vida se abre para invitarte a compartir lo bello del interior.
Asociarte a todo lo bueno que uno ha sabido coleccionar.
Una acumulación positiva que es energía natural.
El clima que se acerca y te dan ganas de comenzar a sembrar.
Esa maravillosa experiencia que tiene lugar en el futuro y que cada día, te ayuda a ser responsable.
Gotas de amor que vas depositando en el recipiente que bien puede ser tu ser.
Caricias cotidianas en las que vas ofreciendo lo mejor de vos.
Ver crecer sensaciones que se expanden y querés compartir con los que te rodean.
Un saludo de bienvenida a los que se quieren sumar.
Una comunidad que florece con deseos contagiosos.
Caminando por las calles del destino te cruzás con personas e imágenes que te alegran.
Tu rostro transmite lo que va tomando forma desde el alma.
Núcleo divino que hace bien y tus emociones se potencian.
Tu cuerpo se suelta y se permite bailar.
Ya no hay nada que te atrape, sino que aprendiste a liberar el perfume de la paz.
Despertar de sueños agradables y confirmar que pueden hacerse realidad.
Alcanzar la meta anhelada es posible, porque la fe, también crece junto a lo que sembraste.
Y el amor que fortaleciste en vos, tiene ganas de que lo conozcan.
Y las puertas de las oportunidades se abren en nombre del amor.
MARIANO SANTORO

martes, 19 de marzo de 2019

Puerta de amor

Hubo una vez en que te fuiste acostumbrando al encierro.
Una inmensa habitación se había convertido en tu planeta.
Todo sucedía ahí dentro y lo que no, ni siquiera lo imaginabas.
No creías que afuera, podría pasar algo interesante.
Esas largas paredes que aprendiste a llenar con tus dibujos y pinturas.
Acomodaste los muebles, al igual que tus emociones.
Pocas veces le diste importancia a la rutina, porque siempre encontrabas algo para hacer.
Sentías que había una luz más poderosa que aquella simple lamparita estancada en el centro del cuarto, iluminando cada rincón.
Sí, esos rincones en los que has pasado algunas noches dejando caer mares de tristeza.
En algunos sueños, se aparecía algo llamado amor y hasta le temiste.
Lo que uno desconoce, se lo discrimina o se le teme.
Y algo estaba naciendo en vos.
Un sentimiento tan profundo y verdadero que comenzó a florecer.
El más puro amor, salía de tu ser para potenciar la luz de ese cuarto gigante.
Y observaste que en un lado, no había pared completa, sino que había una puerta bastante alta.
Tu encierro emocional se ilusionó y tus ojos acompañaron la sorpresa.
Te elevaste tan delicadamente que parecían pasos de ballet.
Caminaste hacia ella con el corazón en la mano, ya que él, sería la única llave que abriría.
Y dejaste entrar todo lo que necesitabas para continuar y a la vez, te sentiste libre de animarte a salir a vivir la vida.
MARIANO SANTORO

lunes, 18 de marzo de 2019

Dibujar con el corazón

El inmenso placer de disfrutar de la niñez.
De comprender que todo se trata de un juego y que la misión es divertirnos.
Un compilado de sueños que nos animamos a fabricar durante noches eternas.
Y despertar con alegría y regalar sonrisas a la vida.
Y la obligación principal es inventar un nuevo juego.
Las herramientas ya están extendidas en el piso y sólo debemos comenzar.
Esa pared gigante que se encuentra delante, será cubierta con la inspiración de lo que sienta el corazón.
No tenemos apuro porque sabemos que mientras más disfrutemos del presente, más lo valoraremos en aquéllo que llaman futuro.
En esta oportunidad no quisimos compañía.
Muchos amiguitos se hubieran sumado a esta experiencia.
Pero tomamos la decisión de hacerlo por nuestra cuenta y llegado el momento, ellos vendrán a ver la obra.
No nos pusimos fechas, pero sí algunas reglas básicas.
Nuestra especialidad han sido las noches llenas de cuentos y ese cielo, era el comienzo de la tarea.
Las bellas estrellas que formaban nombres y dibujos.
Alguna estrella fugaz que viajaba cruzando la noche en las que las palabras hacían silencio por respeto.
Y la hermosa luna sería tan grande como las ganas de conocerla y tocarla .
Iluminar una blanca pared, es un interesante reto y le daremos cielo de día, porque es también amiga de la noche.
La creación, saldrá de todo lo bello que vive en el corazón.
Eternizaremos un momento especial de nuestra vida y al mirarla, nuevas sonrisas llegarán para contagiar a cada observador.
MARIANO SANTORO

domingo, 17 de marzo de 2019

Viaje de sol + edad

Tengo muy presente cuando subí por vez primera a una bicicleta.
El gran desafío de mantener el equilibrio.
Sí, bastante parecido con lo que es la vida en realidad.
Que los movimientos no sean agresivos y no girar demasiado para ningún lado.
La vista, lo más derecha y hacia aquél horizonte que no llegaba nunca.
Y la vida, pasaba como palos de postes, como luces de avenidas, como emociones que se convierten en adultas.
Y en ese viaje, uno aprendió a valorar la soledad.
Las ruedas que supieron andar por caminos de todo tipo, las mismas que fortalecieron las piernas.
Y la luz de fe que acompañó durante el trayecto.
La guía perfecta para poder dialogar con nosotros mismos. 
Muchas noches de alegría y diversión.
Y los días que amanecían con compañía, pero sabiendo que en la soledad, creceríamos en varios niveles.
Ruedas que aprendieron a girar.
Pensamientos que se acomodaron en el camino.
Y hoy, poder observar el sol y valorar su agradable calor.
Y la edad, que juega con los recuerdos.
Algunas cosas quieren repetirse, pero sabemos que hoy tienen una nueva mirada, porque el viaje duró lo suficiente para saber que hubo impulsos adolescentes.
La paciencia de emprender un nuevo viaje, aunque la bicicleta tenga antigüedad, sigue con los deseos genuinos de jugar.
La utilidad que le demos al viaje, fabricará nuevos recuerdos que sabrán acompañar otros momentos de sol y de la edad.
MARIANO SANTORO

viernes, 8 de marzo de 2019

Despierta

Has estado en la mente de muchas personas durante demasiado tiempo.
Has sido influencia para decenas de niñas que han querido tener una parte de lo que ha sido tu vida.
Has dejado en el camino, a varios corazones que no estaban en tu misma sintonía.
Te has privado de apostar a momentos, porque creíste que merecías algo mejor.
Te encerraste luego de haberte enfrentado a lugares oscuros y te encontraste con una parte de la cual tuviste que aprender a convivir.
Nadie mejor que vos, conoce de edificar muros y altas paredes.
Tu protección, siempre ha sido la prioridad.
Y la fortaleza que hoy te enorgullece, tuvo su extensa construcción.
Las noches en las que has hablado con todas las mujeres que deseabas ser.
Cada etapa, tuviste tus propias metas y al alcanzarlas, creabas nuevas.
Y en esa sana ambición personal de superación, creciste.
Supiste plantar demasiadas semillas, incluso, en lugares secos.
Pero todo es parte de la experiencia que hoy es tu manual de experiencia.
Has soñado diferentes situaciones para cuando te sientas fuerte.
Has quitado el sueño a varios hombres, porque todo en vos, enamora.
Y hoy llegó el momento tan esperado.
Despierta, la vida que anhelaste ha llegado.
Esa ventana que fue tu mejor amiga durante años, se abre para ofrecerte la vida que jamás te animaste a soñar.
No por imposible, sino porque es tiempo de sorprenderte y de confirmar que siempre, se puede estar mejor, incluso, cuando siendo tan poderosa como lo sos, porque la que despierta, es tu propia luz.
MARIANO SANTORO

lunes, 4 de marzo de 2019

Manos que hablan

Hacía bastante tiempo que no te veía, pero bien sabés que en cada cumpleaños, me hacía presente a través de un llamado.
Escuchar tu voz, hacía bien, aunque te quejabas, pero era parte de tu personalidad.
Y siempre te hacías espacio para poner tu cuota de humor.
Una persona muy especial que trabajó hasta que pudo, porque de haber querido, seguiría.
Leal, como la sangre que corre por tus venas.
Y en este encuentro, hubo pequeños cruces de miradas.
Entiendo tu cansancio, pero de alguna manera, nos miramos.
Y te tomé la mano, nos agarramos con fuerza.
Sentí que me hablabas.
Me saludabas y me decías cosas.
El entorno y la situación no era la mejor, pero era la que nos tocó.
Y en ese tocar, tu mano me dijo gracias.
Sentí la despedida, sentí que querías hablar y decir muchas cosas.
Quise abrazarte, pero tu cuerpo había cambiado.
La fuerza, hoy estaba en tu corazón.
Y ese motor, se conectó con tu mano derecha para entrelazarla con la mía.
La dureza de lo que estaba pasando, no impidió nuestra comunicación.
Tendré tiempo para seguir descifrando todo el mensaje que me diste con tu mano.
Te voy a extrañar, porque fuiste un buen maestro y muy buena persona.
MARIANO SANTORO