La vida me encuentra detenido, observando hacia el presente.
Es aquí en donde tengo el deber de reinventarme.
El golpe llegó y nadie puede estar preparado para eso, pero sí, en modo prevención.
La prioridad ha sido desde hace tiempo, la salud mental.
Y mi conexión con ese niño que vive en mí; hoy se fusiona con la persona más importante.
El sol, quiere darme algunas pistas para que no me sienta perdido.
Y todos necesitamos un pilar.
La confianza de que sabemos dónde apoyarnos, en quién queremos apoyarnos y sentirnos queridos.
Todas las etapas de mi vida, se juntan para jugar.
Recupero la esencia de cada momento.
Y entre todos, hacemos lo mejor que podemos.
Algunas emociones se quedan en silencio y respetando.
Las circunstancias giran en círculo, pero sin temor a encerrarme.
Y me sigo abriendo a la fe.
Y aunque el niño hoy no se anime a sonreír; la alegría brillará pronto.
Todo es un proceso y las semillas ya están bien aferradas al amor.
La vida me puso ante un cuaderno en blanco y la experiencia, tendrá que hacer lo suyo.
Crecer es la misión.
Y en cada canción, siempre me sentiré acompañado.
MARIANO SANTORO