miércoles, 29 de junio de 2011

Extrañar

Extrañar es saber que me haces falta y que todo lo que has hecho por mí y que al estar a mi lado, me hace feliz.
Extrañar es caminar sin rumbo y saber que mi meta siempre serás vos.
Extrañar; porque no me salen las palabras para expresar lo que siento.
Extrañar; porque mis brazos pierden la movilidad de saber que no pueden abrazarte.
Extrañar; porque al no mirarte, solo puedo ver todo lo bueno que dejaste en mi corazón.
Extrañar; porque sé que estás en el lugar más preciado que tengo y es mi alma; estás en mi esencia.
Extrañar es pensar, soñar, ilusionarme y recordar los momentos vividos; es traer de nuevo la gran cantidad de charlas que tuvimos y que muchas han finalizado en risas y otras tantas, en el lenguaje del amor.
Luego de haber pasado horas con alguien y te sentiste extrañamente cómoda; cuando esas horas parecieron minutos y te das cuenta que ya mismo quisieras repetirlas; cuando sabés que un nuevo día comienza y que las obligaciones hacen que te separes de tu otra mitad; que al ver que cada paso que da y se aleja, se te quiebra el corazón; que tan solo recordando algún pequeño momento volvés a sonreír; que te acordás de las veces en que discutieron sin sentido y que nadie tuvo la razón ya que el tema era insignificante; cuando el mundo podría explotar y lo único que te importa es saber que está a tu lado:
Eso es extrañar.
También es extrañar escribirle a alguien sin saber que lo va a leer.
Es hacer cosas sin esperar de la otra persona, sino que lo hacés del corazón y eso te da felicidad.
Cuando alguien te brinda su tiempo y se preocupa por vos, es cuando te valora y respeta.
Y si alguna decisión hacen que se corte el diálogo, tan solo sabiendo que diste lo mejor de vos y que hiciste todo lo humanamente posible, te hará bien.
Y ahí también te darás cuenta que estás extrañando a tu otra mitad.
Funcionamos con lo que vinimos de fábrica y el corazón se encarga de sumar a personas que llenen hermosos momentos de nuestra vida.
Nunca dejes de extrañar, ya que si lo haces, te darás cuenta que nunca quisiste a nadie.
Y cuando puedas, hacéselo saber a la persona que comparte su corazón con vos y que tiene un lugar privilegiado, aunque sea tan solo una amistad.
MARIANO SANTORO