La naturaleza ha sido sabia al elegir la fecha en que nazcas.
Nada estaba librado al azar, ya que para jugar y divertirte, has nacido.
Naciste mujer y con un plan por realizar.
La semilla del amor fue sembrada con sueños idealizados.
Verte crecer era una tarea agradable y sorpresiva.
Supiste atravesar inconvenientes y te hiciste fuerte gracias a tus raíces.
Las enseñanzas han dado buenos frutos y el mejor de ellos, has sido vos.
Crecer, no sólo se trataba de cambiar de tamaño; sino de ver como florecías y te transformabas cada día en una belleza femenina.
Aprendiste a abrir tus pétalos y deslumbrar a todos los que se acercaban a vos.
Maravillados quedaban cada vez que te miraban.
Y vos querías que miren hacia adentro; al centro de tu ser.
Y conociste lo que es sentir pasión y brotaron de ti sentimientos encontrados.
Todo misterio estaba por ser descubierto por la persona que elegiste.
Y las pruebas del amor han querido darte mucho más.
Y no todo ha sido rosas, porque las espinas también tienen su encanto.
Todo obstáculo que nos frena momentáneamente, nos da una lección que tomamos conciencia con el tiempo del significado de ese aprendizaje.
Y crecer, también es abrirse a lo nuevo, a vivir las experiencias de la vida.
De sorprenderse, de redescubrir lo que nos rodea y darle el valor verdadero.
De acumular lo bueno y darle importancia a lo que nos suma.
Conociste todos los climas porque sabés que todo tiene un motivo de ser y el clima que más importa, es el interno.
Las personas necesitan condimentar su vida y vos, sos la creadora de sabores; de los mejores aromas que puedan existir.
Mujer, como la luna; como los sueños de un hombre queriendo encontrar eterna felicidad.
Dama, elegante y fina para que los demás, puedan admirarte y sentirse orgullosos de estar a tu lado.
Femenina como una flor; hermosa como la vida.
Bellos deseos que el ser humano siembra y espera de la paciencia para que un día, se de cuenta que todo tiempo invertido ha sido valioso.
Nos encontraremos en la naturaleza!
MARIANO SANTORO
Nada estaba librado al azar, ya que para jugar y divertirte, has nacido.
Naciste mujer y con un plan por realizar.
La semilla del amor fue sembrada con sueños idealizados.
Verte crecer era una tarea agradable y sorpresiva.
Supiste atravesar inconvenientes y te hiciste fuerte gracias a tus raíces.
Las enseñanzas han dado buenos frutos y el mejor de ellos, has sido vos.
Crecer, no sólo se trataba de cambiar de tamaño; sino de ver como florecías y te transformabas cada día en una belleza femenina.
Aprendiste a abrir tus pétalos y deslumbrar a todos los que se acercaban a vos.
Maravillados quedaban cada vez que te miraban.
Y vos querías que miren hacia adentro; al centro de tu ser.
Y conociste lo que es sentir pasión y brotaron de ti sentimientos encontrados.
Todo misterio estaba por ser descubierto por la persona que elegiste.
Y las pruebas del amor han querido darte mucho más.
Y no todo ha sido rosas, porque las espinas también tienen su encanto.
Todo obstáculo que nos frena momentáneamente, nos da una lección que tomamos conciencia con el tiempo del significado de ese aprendizaje.
Y crecer, también es abrirse a lo nuevo, a vivir las experiencias de la vida.
De sorprenderse, de redescubrir lo que nos rodea y darle el valor verdadero.
De acumular lo bueno y darle importancia a lo que nos suma.
Conociste todos los climas porque sabés que todo tiene un motivo de ser y el clima que más importa, es el interno.
Las personas necesitan condimentar su vida y vos, sos la creadora de sabores; de los mejores aromas que puedan existir.
Mujer, como la luna; como los sueños de un hombre queriendo encontrar eterna felicidad.
Dama, elegante y fina para que los demás, puedan admirarte y sentirse orgullosos de estar a tu lado.
Femenina como una flor; hermosa como la vida.
Bellos deseos que el ser humano siembra y espera de la paciencia para que un día, se de cuenta que todo tiempo invertido ha sido valioso.
Nos encontraremos en la naturaleza!
MARIANO SANTORO