El azar te fue llevando por diferentes caminos.
Jamás perdiste, sino que creciste.
En el viaje, descubriste cosas en vos, que no le habías prestado atención.
Y más allá de algún tropiezo; no te impidió seguir.
Chocaron algunos pensamientos que no querían tu evolución.
Hasta que lograste enfrentarte a tus sentimientos.
El único rival es tu mente y le vas a ganar.
Buceaste en tu ser hasta localizar la verdadera esencia.
En la profundidad, suele haber frío y tu misión, era recuperar el calor emocional.
Cualquier oportunidad dentro de la vida, puede resultar un laberinto.
Pero recuerda que la dueña de la llave, sos vos.
No tengas apuro y disfruta de cada detalle.
No es necesario recuperar a la persona que fuiste, sino darle la bienvenida a la que sos hoy.
Construye tu mundo y habitalo con todas tus pasiones.
En las calles de la existencia, tu sentir, es la mejor creencia.
Inventa alternativas, dibuja tus ideales.
Ya no hay oscuridad, porque tu propia luminosidad es tu faro.
Salir es una cuestión de relojes y el tiempo está a tu favor.
Pero el juego continúa y el amor es quien te va a salvar.
MARIANO SANTORO